Chill out: composición armoniosa y relajada. Es un termino que acuña un género musical pero que ha transcendido también a cualquier espacio que genere esas sensaciones. En muchas ocasiones hemos citado la importancia de la armonía a la hora de celebrar un evento. Un chill out se convierte en una atmósfera de acogida, perfecta para el late night de una boda, por ejemplo.
Cualquier espacio abierto es susceptible de convertirse en chill out con el adecuado tratamiento de los recursos. Lámparas, velas, el blanco, los tejidos suaves y delicados forman un conjunto junto a los cojines, las alfombras, los distintos tamaños y colocación que evocan un sentimiento de paz y aportan una belleza superior.
La iluminación se convierte en pieza clave en este entorno. Las luces tenues, suaves y el juego de las sombras hacen del espacio chill out un enclave íntimo y único, adaptado a cada lugar de celebración. El toque de las velas contribuye a añadir un momento romántico y la iluminación troquelada crea un entorno de ensueño y rodea con un halo especial el lugar.
Nuestro equipo de Goyo Catering cuenta con el trabajo y colaboración de Sonia, directora de la empresa IDEA-EVENI. Ella conjuga perfectamente los espacios para crear un entorno divino que captura, atrae y convence a todos los invitados. Supone una transformación total del entorno para una ocasión inolvidable, como puede ser una boda.
Nuestra experiencia particular nos revela que los espacios chill out siempre son un éxito por varias razones. Más allá de la belleza y el diseño, que si bien armoniza con el resto del evento también marca un punto y aparte; lo que más se resalta es la comodidad. Las texturas de los sofás, la suave alfombra, los cojines, etc son maneras de relajar el cuerpo que, sobre todo a ciertas horas de la celebración, supone un refuerzo físico excepcional.
Además en el espacio chill out se juntan las preferencias de todas las edades. Es decir, las personas mayores agradecen un espacio donde relajarse y estar cómodas sin tener que apartarse de la fiesta. Los más jóvenes se ven seducidos por el ambiente creado y se convierten en partícipes de la fiesta pudiendo aguantar hasta altas horas de la madrugada, por ejemplo, dada la comodidad que supone. El chill out se convierte entonces en el espacio ideal para la recena o para tomar copas entre amigos, combinando fiesta y bienestar.